miércoles, 29 de enero de 2014

Sería ilógico ponerle título

Normalmente las personas buscan algo extraordinario en sus vidas.  Si no intentan parecerse a algún poeta o artista, al menos quieren un color diferente de ojos. No obstante, en los suyos -café oscuro, aquel color que abunda en los radares del alma en este hemisferio- existen órbitas nuevas. ¿Qué significa cuando cada vez que lo ves, exploras nuevas dimensiones? No sé. No sé por qué se sienten tantas cosas. No me decido o simplemente no da para pensar. Quizás las características de este amor son tan bipolares como sus dueños.
Te…
Te quiero.

¿Te quiero? Tengo muchos espacios por descubrir. Por el momento desconozco qué palabra es suficiente. Términos, etiquetas, consensos. Creo que eso es lo que me enamora, que en realidad no sé qué decir que siento puesto que los dos lo estamos inventando sobre la marcha.  Lo que sí puedo asegurarte es que ese algo es tanto-tanto-tanto así que no quiero nada extraordinario, sólo a ti.

No hay comentarios:

Publicar un comentario